Fue mandado construir por el Rey Alfonso VII, llamado el Emperador, y cuyo hijo Fernando está enterrado en la iglesia.
Es el convento mas antiguo de Toledo teniendo noticias de su existencia desde el año 1131. Es de planta cuadrangular.
La puerta de entrada fue realizada por Alonso de Covarrubias en el estilo renacentista propio de la época.
Francisco de Villalpando, autor de la reja del retablo mayor de la catedral, se encargó de reparar los destrozos que hizo un incendio ocurrido en 1556.
El edificio tiene dos patios principales siendo el principal el del claustro donde tienen lugar las procesiones en torno al cual se organiza la vida litúrgica del monasterio.